Gregorio describe como era la vida en los campamentos de la guerrilla
- Capítulos:
- Capítulo 5: Experiencias de la guerrilla
- Testimoniante:
- Gregorio
Transcription
Bueno en el campamento, lo primero era la seguridad del lugar, verdad. Más que todo, la seguridad de toda la gente armada pues, voy a decir, verdad y la gente de masa porque también la gente de masa estaba en respaldo de nosotros. Este, por lo menos en el campamento de El Portillo habíamos cuatro pelotones, verdad. Había un pelotón para seguridad; uno para servicios; otro para servicios así para la cocina, y para ir a… como antes no teníamos milpa, verdad, a recolectar, nosotros le decíamos la recolección; este, y la demás de gente que quedaba nos íbamos a entrenamiento militar a una hora, desde las cinco de la mañana hasta la siete, verdad; de ahí el desayuno a las ocho, empezábamos la charla política, verdad, una otra hora; después al almuerzo y a las dos de la tarde otra charla, de allí a la de las cuatro, o las cinco… se hablaba de lo que era la comida, verdad, la cena, verdad; de allí pues también cenamos en la noche, verdad, de seis a nueve. Bueno, varios ejercicios, verdad. Entonces no nos manteníamos solo ahí de balde, verdad, solo ahí, verdad, si no que andaba la gente metiéndose en servicios, hacían entrenamiento, otros a patrullaje, verdad; pues sí a ver, verdad, el control de territorio verdad, pero todos éramos de servicio, todos éramos de seguridad, verdad. El hecho de que yo era guerrillero no quería decir que no íbamos a dar al molino y nos poníamos a moler, verdad. Si no que todos lo hacíamos, verdad. Si el día que no me tocara ir al patrullaje o a la posta, se quedaba el trabajo ahí del campamento, verdad, la leña… todo eso.