Lidia recuerda el desembarco en 1986 en Arcatao, y como fue amenazada en las semanas anteriores al operativo militar.
- Testimoniante:
- Lidia- 2/2
Transcription
El desembarco fue en el ochenta y seis, que venían a matar a todos. A mí ya me habían tenido allí en ese comedor que está allí en la esquina junto a la alcaldía. Ya me habían tenido a punta de fusil. A pues el mero teniente me dijo “vieja gran tal por cual, guerrillera”. Pero es que una mujer que no es alentada nos había puesto el dedo diciendo a toda la población que éramos guerrilleros. Por eso es que venía el Coronel Cáceres a masacrar a todo el pueblo. Si es que el teniente llevaba la gran lista. Porque me dijo un soldado a mi: “mire señora, ¿usted cómo se llama?”, me dijo un soldadito de aquí, de Los Pozos. "Fulana de tal," le dije. "A pues ahí está en la lista de mi teniente," me dijo. "Una señora que vive en la esquina," me dijo. "Esa si se le ha quedado alguna gente de aquí, de esta población que está, es bastante," me dijo. "Todo lo sabe, anotan a la lista mi teniente." Por eso es que venía el Coronel Cáceres a matarnos, y que éramos guerrilleros.
Y cuando llegó a buscarla al comedor, ¿qué pasó?
Ahí llegó un coronel y me dijo “vieja guerrillera”. Solo me trataba solo de vieja gran puta, no más. Todas las palabras que me decía era de vieja gran puta, el mero teniente. Que aquí estaba el operativo. Ah pues entonces, cuando hicieron la gran lista. Entonces, le dije yo: "bueno, cierto, yo soy vieja gran tal, pero también en este mundo nadie nació de una virgen, todos hemos nacido de una gran tal como lo dice," le dije yo. Me amenazó, cinco veces me amenazó a matarme. A pues, a los quince días mandó el Desembarco. Le digo yo al soldadito “¿qué dice el teniente de esa lista?”. “Dice que ahí va a ver qué hace él”. A los quince días ya venía el Desembarco a matarnos a todos. Y porque capturaron a dos periodistas no nos mataron, sino… Ya nos tenían ahí para rociarnos.